Tanto si eres un experto confeso en aviación como si nunca has oído hablar de Howard Hughes, no puedes dejar de sentirte impresionado por los aviones más enormes del mundo. Desde los hidroaviones de madera construidos en la década de los cuarenta hasta las aeronaves que hicieron posible los viajes espaciales, hemos echado un vistazo a algunos de los aviones más gigantescos del mundo y a las asombrosas historias que hay detrás de ellos.
Haz clic en la galería para conocer los aviones más grandes de la historia, ordenados por envergadura de menor a mayor...
Adaptado al español por Alba Mora Antoja, Redactora en Español para loveEXPLORING.
Con una longitud de 76 metros, una envergadura de unos 68 metros y una capacidad máxima de más de 600 pasajeros, el Boeing 747-8 es uno de los mayores aviones comerciales jamás fabricados. El 747 original data de la década de los años sesenta e inauguró la era de los jumbos, por lo que el 747-8 se lanzó en 2005 para aprovechar su éxito.
El 747-8 es más largo que su predecesor. De hecho, es el avión comercial más largo actualmente en servicio. Además, puede acomodar a más pasajeros, pero consume menos combustible y hace menos ruido a pesar de su gran armazón. Propulsado por cuatro potentes motores General Electric GEnx, este avión puede recorrer la longitud de tres campos de fútbol de tamaño reglamentario en solo un segundo.
El avión no solo es largo, también es alto. Su cola, de más de 19 metros de altura, tiene la misma altura que un edificio medio de seis plantas. Apodado "la Reina de los Cielos", la serie 747 consiste en 1.574 aviones que han sido adquiridos por más de 100 empresas y aerolíneas. Entre todos ellos, se han registrado más de 118 millones de horas de vuelo y casi 23 millones de ciclos de vuelo.
El último Boeing 747-8 se entregó en 2023. Se trataba de un 747-8F, un avión de carga que superaba con holgura a su equivalente de pasajeros. El avión no tuvo tanto éxito comercial como sus predecesores, pero compitió con éxito con el Airbus A380, asegurando que sus competidores no dominaran el mercado de los jumbos.
Cuando una puerta se cierra, otra se abre, y el declive de la serie 747 deja paso al Boeing 777X para convertirse en el nuevo avión insignia de la aerolínea. Habrá dos versiones del avión, el 777-8, más pequeño, y el 777-9, más grande. Este último, con sus 77 metros de longitud, arrebatará al 747-8 el título de "avión de pasajeros en activo más largo del mundo" cuando entre oficialmente en servicio en 2025.
También tendrá una envergadura mayor que su predecesor, 71 metros, gracias a las puntas de ala plegables que mejoran la eficiencia en vuelo y le ayudan a atracar en más aeropuertos. El 777-9 tendrá una capacidad típica para dos clases de 426 pasajeros, lo que lo convierte en el avión bimotor de mayor capacidad hasta la fecha. Mientras, el 777-8, más pequeño, ofrecerá una impresionante autonomía de 16.170 km.
Voces expertas predicen que las compañías aéreas se inclinarán por modelos más pequeños, baratos y eficientes en los próximos años, por lo que el 777X podría ser uno de los últimos aviones "jumbo" durante algún tiempo. Los aviones de tamaño medio han ganado en autonomía y eficiencia en los últimos años, y los bimotores ya han sustituido a los engorrosos cuatrimotores en las líneas de producción. Solo el tiempo lo dirá, pero con 453 pedidos pendientes del 777X hasta diciembre de 2023, tal vez a este jumbo aún le quede vida.
El Antonov AN-124, fabricado por primera vez en la Unión Soviética a principios de la década de los ochenta, sigue siendo uno de los aviones más grandes que ha visto el mundo, y está diseñado específicamente para transportar cargas extremadamente pesadas. A pesar de su antigüedad, estos aviones aún pueden transportar la friolera de 150.000 kg de carga útil, dependiendo del modelo exacto. Se construyeron 55 aviones en total, y hasta la mitad de ellos siguen en servicio.
Estos aviones ostentaron numerosos récords mundiales en su época, y sus 69 metros de longitud y 73 metros de envergadura siguen figurando entre los más grandes del mundo. Cada AN-124 tiene su propio sistema de grúa a bordo que puede levantar hasta 30 toneladas, lo que facilita la carga y descarga de mercancías de forma segura en los aeropuertos sin necesidad de ninguna infraestructura especial en tierra.
¿Te gusta? Haz clic en el botón “Seguir” para ver más historias de loveEXPLORING.
El morro del avión se abre hacia arriba para simplificar y facilitar la carga, un diseño innovador que ya incorporan los aviones Boeing y Airbus. A lo largo de los años, ha transportado todo tipo de cargas curiosas: desde transportar una locomotora de tren entera de Canadá a Irlanda en la década de los noventa hasta llevar generadores portátiles a la región de Guadalupe, azotada por un huracán, en 2017.
La mayoría de los aviones más grandes del mundo están relegados a los libros de historia, encerrados en instalaciones militares o restringidos al transporte de carga. Pero un viaje a bordo del enorme Airbus A380, el avión comercial más grande en todos los sentidos que vuela actualmente, está al alcance de cualquiera que pueda permitirse un billete de avión. La aerolínea Emirates, con sede en Dubái, es la que más A380 tiene en su flota, con unos 90 en funcionamiento hasta noviembre de 2023.
Con más de 300 vuelos comerciales diarios, el avión ha transportado a más de 200 millones de clientes. Cada avión es gigantesco con más de 73 metros de largo y una envergadura de 80 metros. Distribuido en dos plantas, tiene una capacidad máxima de más de 800 pasajeros. Pintar el exterior del avión gigante requiere la friolera de 3.600 litros de pintura, suficiente para que Miguel Ángel pintara la Capilla Sixtina 97 veces.
El avión es tan grande que los aeropuertos tuvieron que hacer importantes mejoras para acomodarlo cuando entró en servicio por primera vez en 2007. Pero a pesar de su tamaño, el A380 consume menos combustible que un Toyota Prius. Utiliza dos opciones de motor, el GP7200 de Engine Alliance y el Trent 900 de Rolls-Royce. Además, su diseño vanguardista de las alas y el tren de aterrizaje hace que sea más silencioso que casi cualquier otro avión en el cielo.
Hace nueve años, Emirates celebró su 50º A380 publicando un vídeo que mostraba cómo se fabricó el avión. 800 trabajadores tardaron 80 días en montar el avión de principio a fin, un proyecto enorme para un avión enorme. Se utilizaron más de 10.000 tornillos para unir el fuselaje, más de 4.000 para las alas y 30 personas tardaron 10 días solo en pintar el avión.
A pesar de su impresionante reputación por su comodidad y especificaciones en vuelo, el A380 no fue un éxito financiero. Airbus entregó su último A380 en 2021 (el 123º a Emirates y el 251º en total), poniendo fin a 14 años de producción. El avión era, sin duda, una maravilla de la ingeniería, pero Airbus no llegó a los 1.000 modelos entregados que había previsto. Además, el programa, que superaba el presupuesto, nunca dio beneficios. Las voces críticas dicen que simplemente era demasiado grande, y ahora está siendo superado y sustituido por aviones más pequeños y menos costosos.
Puede que no sea el avión más grande por envergadura, pero el Antonov AN-225 Mriya de 284 toneladas es el avión más grande jamás construido por peso, uno de los diversos récords mundiales que ostenta. Fue desarrollado en los años ochenta para transportar la lanzadera espacial Buran entre instalaciones de la antigua Unión Soviética. Tras el colapso de la Unión Soviética, el AN-225 encontró una nueva vida como avión de carga pesada para la empresa de aviación ucraniana Antonov.
Solo se completó uno de los enormes aviones, y un segundo AN-225 pasó años en producción, pero finalmente se abandonó. Su armazón inacabado sigue en un hangar a las afueras de Kiev. Mriya significa "sueño" en ucraniano, y este avión único en su especie se convirtió en un icono del país al transportar grandes cargas por todo el continente y suministros médicos durante la pandemia. Trágicamente, el avión fue destruido durante la Batalla del Aeropuerto Antonov durante la Invasión Rusa de Ucrania de 2022.
En su apogeo, el avión gigante hacía que todos los demás aparatos parecieran enclenques en comparación. Propulsado por seis motores turbofán, el AN-225 podía transportar hasta 250 toneladas de carga, tenía una envergadura de 88 metros y 32 ruedas para ayudar a distribuir su peso. Para poner el avión en perspectiva, el AN-225 tenía un peso máximo al despegue de 650 toneladas, mientras que la Estatua de la Libertad solo pesa 225 toneladas. Su bodega de carga tenía la asombrosa longitud de 43 metros, es decir, más que el primer vuelo con éxito de los hermanos Wright.
La envergadura del AN-225 nunca amenazó los libros de récords de todos los tiempos, pero seguía teniendo la mayor envergadura de todos los aviones en activo antes de su destrucción. Sigue ostentando el récord mundial del objeto más pesado jamás transportado por vía aérea. En 2009, transportó un generador de una central eléctrica que pesaba la asombrosa cifra de 187,6 toneladas. En mayo de 2022, el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky declaró que Ucrania reconstruiría el avión.
Cuesta creer que un avión construido en la década de los cuarenta siga figurando entre los más grandes del mundo, pero el colosal Hughes H-4 Hercules del famoso aviador Howard Hughes, apodado el “Spruce Goose”, es tan impresionante como siempre. Tiene una envergadura de 98 metros, y cuando se construyó era seis veces mayor que cualquier otro avión de la época.
El avión fue encargado durante la Segunda Guerra Mundial para trasladar suministros y tropas a través del Océano Atlántico en un momento en que cientos de barcos aliados estaban siendo hundidos por submarinos alemanes. Debido a las restricciones de los metales en tiempos de guerra, el Hughes H-4 Hercules se construyó casi enteramente de madera, lo que lo convirtió en el mayor avión de madera jamás construido.
La prensa apodó al avión como “Spruce Goose” por su material, un nombre que Hughes, al parecer, despreciaba. No solo consideraba que insultaba a sus ingenieros, sino que además era inexacto: el avión estaba hecho de abedul. A pesar de su increíble tamaño y de su coste casi igual de increíble, el gigantesco avión no estaba destinado a una vida en los cielos. Cuando se completó, la guerra había terminado.
La enorme nave realizó un solo vuelo en noviembre de 1947. Hughes lo hizo volar más de 1,5 km a una altitud de 21 metros durante un minuto, con varios periodistas y tripulación a bordo, solo para demostrar que el monstruo realmente podía despegar del suelo. Puede que el H-4 Hercules tuviera una vida útil corta, pero Hughes no estaba dispuesto a dejar que se consumiera. El avión se conservó en perfecto estado y fue mantenido por un equipo completo, hasta el punto de que siempre estuvo listo para volar hasta que Hughes murió en 1976.
El Hughes H-4 Hercules era muy conocido por su construcción única y su enorme envergadura, y también batió récords por ser el mayor “barco volador” jamás construido. El avión fue conservado y defendido por Hughes durante su vida, pero cambió de manos varias veces tras su muerte, y ahora se encuentra en el Museo Evergreen de la Aviación y el Espacio de Oregón, en Estados Unidos.
El Stratolaunch, que actualmente ostenta el récord Guinness, tiene la mayor envergadura de todos los aviones jamás creados: unos enormes 117 metros. Es decir, mayor que la longitud de un campo de fútbol americano. El avión fue ideado por Paul Allen, cofundador de Microsoft, y salió de su hangar de California por primera vez en mayo de 2017.
Allen, fallecido en 2018, declaró que le intrigaba la exploración espacial desde que Yuri Gagarin se convirtió en el primer hombre en el espacio en 1961, y que estaba "decidido a ayudar a maximizar el potencial del espacio para mejorar la vida aquí en la Tierra". En lugar de transportar pasajeros, el Stratolaunch está diseñado para llevar cohetes a la altitud de crucero de los aviones comerciales, y lanzarlos al espacio desde allí.
La gigantesca aeronave está diseñada para ser una plataforma de lanzamiento aérea reutilizable. Debería reducir los largos tiempos de espera entre la construcción y el lanzamiento de satélites. También debería dar a los científicos la posibilidad de lanzar cohetes independientemente de las condiciones meteorológicas y reducir significativamente el inmenso coste de enviar cohetes al espacio. Además de su envergadura récord, el avión de 15 metros de altura y 73 metros de longitud está propulsado por seis motores turbofán, tiene 28 ruedas y dos cabinas, y una capacidad de carga útil de más de 226.800 kg.
El Stratolaunch completó su primer vuelo en 2019. Fue un vuelo de prueba de dos horas y media sobre el desierto de Mojave, presenciado por una multitud enfervorizada. Ahora, está cada vez más cerca de su objetivo de lanzar un cohete en pleno vuelo. En diciembre de 2023, el Stratolaunch completó su primer vuelo de prueba con un vehículo hipersónico Talon-A como carga útil, su duodécimo vuelo en total, con una duración de tres horas y 22 minutos.
¿Te ha gustado? Haz clic en el botón Seguir de arriba para ver más historias fantásticas de loveEXPLORING.